domingo, 18 de enero de 2009

Domingo II del Tiempo Ordinario

Juan Bautista tenía dos discípulos que le eran especialmente queridos: Andrés y Juan. A ellos les indica que sigan a Jesús, sin saber seguramente que acabarían siendo san Juan Evangelista y san Andrés Apóstol. Para los dos, la experiencia de vivir con Juan Bautista les condujo a la vocación de quedarse con Jesús. Y quedarse, como los amigos, para siempre.

A nosotros nos ha ocurrido algo parecido, pues después de haber sido bautizados, todos estamos llamados a vivir una amistad personal con Jesús, que se va iniciando en esta vida y permanecerá tras ella por toda la eternidad. También nosotros, como Juan y Andrés, tenemos que ir descubriendo poco a poco lo que significa escuchar a Jesús y seguirle. Escuchar cómo nos llama personalmente, por nuestro nombre y apellidos, como Dios llama al pequeño Samuel. Seguirle confiando en El de nuevo cada día e intentando hacer las cosas como El nos ha enseñado.

Saber descubrir la voz de Dios cada jornada, para poder seguir a Jesús en el día a día, se hacen posibles en un momento muy concreto: nuestro tiempo de oración. Allí nos quedamos con Jesús, como Juan y Andrés, y en así El nos irá hablando al corazón para conquistar nuestra amistad.

martes, 6 de enero de 2009

Ya vienen los Reyes

Esta encantadora imagen de la Sagrada Familia abrió este año la cabalgata de Reyes en Robledo, que este año ha contado con la participación especial de los jóvenes de confirmación de la parroquia. A ellos les agradecemos el esfuerzo de dedicar la tarde a que la cabalgata fuera más lucida, cosa que consiguieron ampliamente, para alegría especialmente de los niños.
Quedan convocados para una celebración de fin de fiesta el sábado después de la misa de la tarde, y se abre el concurso de ideas para el año que viene.

lunes, 5 de enero de 2009

Los misioneros comienzan su labor

Aquí vemos a algunos de los misioneros que han comenzado su tarea en Robledo. Con mucha ilusión, se han dedicado a visitar enfermos, proponer actividades para jóvenes, preparar la celebración de las misas y realizar una gran gymkana por la plaza para los niños. En breve publicaremos una crónica para que podamos recordar estos días llenos de gracias y frutos.

Con el Niño en el balcón

Muchos balcones del pueblo nos muestran una particular felicitación de Navidad.Una tela de color rojo, que simboliza el amor que Dios nos tiene, arropa a un Niño Jesús que nos sonríe y nos bendice. Robledo está lleno de esas sonrisas y bendiciones que nos trae el Niño Dios, y que contemplamos con esperanza al pasear por nuestras calles. Sólo falta que esas balconeras las llevemos muy dentro de nosotros, y que custodiando en el corazón la sonrisa y la bendición de Jesús seamos capaces de mostrarla a los demás.

El belén de la parroquia


Todos los años tenemos la suerte de que Vicente, Toño y Tomás nos monten un espléndido belén bajo el coro de la parroquia. Para admiración de chicos y grandes, el belén nos va mostrando el misterio del nacimiento de Jesús, rodeado del pequeño pueblo de Belén, con sus panaderos, herreros, artesanos, labradores... La creación también acompaña al Niño Jesús mostrando un espléndido huerto robledano, un río con bosques, campos y hasta desiertos. El castillo de Herodes pone la nota trágica, que esperamos que se desvanezca con la luz de la estrella de los Magos

viernes, 2 de enero de 2009

Monaguillos en el Zoo

Ya iba siendo hora de que los sufridos y trabajadores monaguillos de la parroquia tuviesen un pequeño respiro. Con buen tiempo y mucha ilusión nos bajamos al Zoo de Madrid, para pasar un día de convivencia y diversión en el que no hubo ni un minuto de aburrimiento. Además de hacer nuevo amigos, como los lemures, pudieron disfrutar en directo de la riqueza enorme de la Creación de Dios.

Para poner la guinda nos fuimos a visitar la Catedral de la Almudena y los belenes del centro de Madrid, con especial atención a los alrededores de la Plaza Mayor. Ya hablan de una futura salida al parque de atracciones que promete...

Navidad en la Estación

También en la capilla de Santiago Apóstol, en el barrio de la Estación, hemos podido celebrar la Navidad en familia y por todo lo alto. Desde luego alegría y ritmo no faltan por estas alturas, como se puede ver en las imágenes.

Concierto de Navidad














El día 21 de diciembre pudimos disfrutar el tradicional concierto de Navidad que nos ofrecen los coros de Robledo. Primero fue el Coro Municipal, y después el Coro de Niños del CEIP Virgen de Navahonda, quienes han tenido una temporada verdaderamente brillante. La multitud que abarrotaba la nave del templo parroquial tuvo ocasión de prepararse a la celebración de la Navidad de una manera incomparable.

Sembradores de estrellas

La Navidad comenzó en la parroquia el día 20 de diciembre, gracias a los niños de la parroquia y algunas intrépidas madres y catequistas:

Los niños hicieron una oración en la capilla y luego repartieron casi 2000 estrellas entre los robledanos para felicitarles la Navidad, convirtiéndose en verdaderos sembradores de estrellas. Una mañana muy divertida, y para muchos emotiva y esperanzadora.