lunes, 31 de octubre de 2016

Lunes de la semana XXXI

EVdHOY: "Jesús les dijo: cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; dichoso tú, porque no pueden pagarte". Cada vez que atendemos o ayudamos a un amigo es como darle un banquete de cariño, comprensión, empatía y acogida. Espléndidos manjares que reconfortan al amigo y le dan nuevas fuerzas y alegría. Jesús nos pide que ese banquete también se lo podamos ofrecer a aquéllos que no tienen a nadie que les invite, especialmente las personas que viven la pobreza y la oscuridad de la soledad y el abandono. Es a ellos a quienes nos dirige Dios, porque es en ellos en donde le encontramos. Ofrecer el banquete de nuestro cariño y dedicación a esas personas, en los sencillos gestos de cada día, es invitar a Dios a lo mejor de nuestro corazón. Por ello, es la mejor manera de devolver a Jesús la invitación que tantas veces nos hace a lo largo de la jornada, y muy especialmente la mejor manera de agradecerle su gran invitación a la Eucaristía. El banquete de la Misa es correspondido cuando a Dios le ofrecemos el banquete de nuestra misericordia hacia los que sufren en pobreza y soledad.

domingo, 30 de octubre de 2016

Domingo XXXI del Tiempo Ordinario

EVdHOY: "Jesús dijo a Zaqueo: Hoy ha llegado la salvación a esta casa, pues el Hijo del hombre ha venido a buscar y salvar lo que se había perdido". La historia de Jesús con Zaqueo no sólo es un encuentro, es esencialmente una salvación. Si el Señor le busca es porque quiere llenar su casa de salvación, recuperando y sanando todo lo que la mala vida de Zaqueo había echado a perder. Así, todo encuentro con el Señor es una historia de búsqueda y salvación por parte de su Misericordia, que desea siempre sanar y reparar. Abramos hoy nuestra casa a este inmenso amor salvador para que pueda ser sanada y salvada en todo aquello que nos parezca perdido.

viernes, 28 de octubre de 2016

Fiesta de san Simón y san Judas Tadeo

Apóstoles, el primero llamado Cananeo o Zelotas, y el segundo, hijo de Santiago, llamado también Tadeo, el cual, en la última Cena preguntó al Señor acerca de su manifestación, recibiendo esta respuesta: «El que me ame, observará mi palabra, y el Padre mío le amará, y vendremos a él y haremos nuestra mansión en él». Simón es patrono de los madereros, los trabajadores forestales, albañiles, curtidores, talabarteros, tejedores y tintoreros; y Judas protector en graves dificultades y preocupaciones, en situaciones desesperadas y «causas perdidas». Que ambos Apóstoles nos ayuden a seguir a Jesús cada día más de cerca.

miércoles, 26 de octubre de 2016

Jueves de la semana XXX

EVdHOY: "Jesús les dijo: ¡Cuántas veces os he querido reunir, como la clueca reúne a sus pollitos bajo las alas! Pero no habéis querido. Vuestra casa se os quedará vacía". El Amor de Dios es tan maravilloso que se representa de innumerables figuras distintas sin que ninguna lo agote. Una de ellas es el amor de una madre, que busca reunir a sus hijos en torno a su corazón para acogerlos, cuidarlos, alimentarlos y entregarse por su felicidad. Así nos ama Jesús, como Él mismo nos recuerda con la imagen de la gallina y los polluelos. Por eso también Jesús experimenta el sufrimiento del Amor rechazado. Lo que sufre una madre cuando un hijo muy necesitado se aleja con ingratitud y orgullo es también figura del dolor de Jesús cuando una persona se resiste a recibir su Amor. Lo que sufre una madre cuando su hijo rebelde va de calamidad en calamidad es también figura de lo que sufre Jesús cuando, al rechazarlo, dejamos que la casa de nuestra vida termine por quedársenos vacía. Podemos mirar hoy ese Amor maternal de nuestro Dios, y pedirle que jamás el orgullo, la desconfianza o los engaños del demonio nos aparten de sus brazos

martes, 25 de octubre de 2016

Martes de la semana XXX

EVdHOY: "Jesús les dijo: el Reino de Dios se parece a un grano de mostaza que un hombre toma y siembra en su huerto; crece, se hace un árbol y los pájaros anidan en sus ramas". Es Dios mismo quien ha sembrado su presencia, su Reino, en nuestras vidas. Dios mismo ha enviado a su Hijo como pequeña semilla de mostaza, en la pequeñez de Belén y del Calvario, para que en la Resurrección se convirtiera en un árbol hermoso en medio de este huerto de Dios que es nuestro mundo. Jesús es el árbol en quien nos podemos refugiar y habitar, del que podemos tomar cada día savia y frutos, cuya sombra nos serena y nos repara. Cada momento de pequeña oración, de un pequeño recuerdo de Dios, de un pequeño sacrificio ofrecido a Dios por los demás, es como volver a poner otra pequeña semilla de Jesús en nuestra vida, para que ese árbol siga creciendo y nuestra vida y alegría con él.

domingo, 23 de octubre de 2016

Lunes de la semana XXX

EVdHOY: "Jesús dijo: A esta mujer, que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada dieciocho años, ¿no había que sanarla en sábado?". Muchos años viviendo encorvada, encerrada sobre sí misma en su agobio y sufrimiento. Y sin embargo esa mujer era hija de Abraham, el padre de los creyentes, era una mujer de fe. Por eso puede alcanzar a Jesús, en medio de su limitación y su incapacidad, y recibir la Misericordia de sus Manos sobre ella, que la sana y la renueva. En sábado, el día que culmina la Creación, Jesús lleva a plenitud la vida de esa mujer. Así, toda nuestra vida, con sus limitaciones e incapacidades, es una obra que va modelando el Señor con sus Manos, hasta esa culminación de su obra en el Cielo. Pongamos nuestro agobio y sufrimiento cerca de Jesús moviendo nuestra fe hacia Él, para recibir el calor de sus Manos y poder así recuperar las fuerzas y la esperanza.

Jornada del DOMUND

El domingo de las Misiones pone ante nuestros ojos el maravilloso cumplimiento del último deseo de Jesús: id por todo el mundo y anunciad el Evangelios. Los misioneros entregan al vida entera al cumplimiento de este deseo, llevando el Reino de Dios a todos los rincones del mundo. El Domingo Mundial misionero nos llena de esperanza al ver cómo tantos hermanos nuestros reparten los dones del Reino, espirituales y materiales, entre los más necesitados de fe, esperanza, salud y alimentación. Su labor, síntesis de la generosidad humana y de la increíble ayuda de la Providencia de Dios, nos recuerda también la que debe ser la nuestra: participar en su misión, pues todos tenemos la misión de llevar el Reino de Dios allá donde estamos. Participar con la oración, con la ayuda económica y material, y con un renovado compromiso con nuestro testimonio de fe. El mejor misionero es el cristiano que cada día vive su fe con los ojos puestos en la Misericordia de Dios y en las necesidades de los que tiene más cerca. Seamos uno de ellos, y vivamos con agradecimiento a Dios y esperanza en su Providencia esta preciosa Jornada.

viernes, 21 de octubre de 2016

Memoria de san Juan Pablo II

 
¡No tengáis miedo! Cristo conoce lo que hay dentro del hombre. ¡Sólo Él lo conoce! Con frecuencia el hombre actual no sabe lo que lleva dentro, en lo profundo de su ánimo, de su corazón. Muchas veces se siente inseguro sobre el sentido de su vida en este mundo. Se siente invadido por la duda que se transforma en desesperación. Permitid, pues, -os lo ruego, os lo imploro con humildad y con confianza- permitid que Cristo hable al hombre. ¡Sólo Él tiene palabras de vida, sí, de vida eterna!

jueves, 20 de octubre de 2016

Viernes de la semana XXIX

EVdHOY: "Jesús les dijo: haz lo posible por llegar a un acuerdo con tu adversario, mientras vais de camino". El camino de la vida pone a nuestro lado muchos acompañantes. Con algunos, sin embargo, las ofensas, los enfrentamientos, las envidias, la falta de atención y compasión, y los malentendidos de la convivencia, nos puede pasar que más que acompañantes se conviertan en adversarios. Para esas personas con las que no podemos caminar con paz, nos pide hoy Jesús que renovemos nuestra intención de acuerdo y acercamiento. Al menos la intención, el hacer lo posible,para que esas personas que se convirtieron en adversarios vuelvan a ser acompañantes. Esta difícil tarea de la reconciliación sólo podemos hacerla con mucha paciencia y mucha ayuda de Jesús, que entregó su vida para reconciliarnos con Dios y con nosotros. Pero en su dificultad nos dará la paz de hacer lo posible por no perder a ningún caminante, y quizás con la ayuda de Dios nos dé incluso la sorpresa de recuperarlo como compañero. Ninguno nos sobra en el camino hacia Dios.

miércoles, 19 de octubre de 2016

Jueves de la semana XXIX

EVdHOY: "Jesús dijo a sus discípulos: He venido a prender fuego en el mundo, ¡y ojalá estuviera ya ardiendo!". Por muchas partes del mundo vemos fuegos de guerra, enfrentamiento, odio, rencores y envidias, hogueras que destruyen la paz, la convivencia y la esperanza, llamas que llevan a la tristeza y la pérdida. Sin embargo Jesús nos trae a este mundo un fuego distinto: el calor, la alegría y la luz del Amor de Dios, el fuego cálido y pacífico del Espíritu Santo. Desde el día de Pentecostés Jesús envía estas lenguas de fuego al corazón de cada creyente, para que pueda ser iluminado y calentado por la fe, la esperanza y la caridad, y ser así un punto de luz en medio de los fuegos de tristeza. Acojamos este fuego sereno del Amor de Cristo en nuestra fe, y tratemos de llevar su calor y su luz a las personas que tanto sufren a nuestro alrededor.

Miércoles de la semana XXIX

EvdHOY: "Jesús les dijo: estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre". Siempre tenemos que tener encendida en nuestro corazón la vela de la oración. No sabemos cuando vendrá Jesús, el Hijo del Hombre e Hijo de Dios, a presentarse en nuestra vida: para ayudarnos, para enseñarnos, para acompañarnos, para alegrarnos, o en último término para abrirnos el Cielo. Lo que sí sabemos es que cuando venga necesitará ver encendida en nuestra alma esa vela. Por eso dirigimos la oración a Jesús cada día, y cada hora, para que cuando el Señor nos visite podamos acogerle en la oración y en la fe.

domingo, 16 de octubre de 2016

Domingo XXIX del Tiempo Ordinario

EVdHOY: "Jesús explicaba a sus discípulos cómo tenían que orar siempre sin desanimarse". Es importante saber cómo rezar, y qué palabras y ambiente de corazón tenemos que usar para dirigirnos a nuestro Padre Dios. Pero igualmente importante es orar con perseverancia, porque no siempre el Señor responde como queremos, o cuando queremos, o para lo que queremos...incluso a veces nos responde de forma tan callada que parece que no nos escucha y que ignora nuestras peticiones y oraciones. Entonces viene el desánimo, y entonces hemos de recordar las enseñanzas y ejemplos de Jesús y de los santos, que nos recuerdan que el terminal de Dios está siempre abierto y en conexión. Sigamos pidiendo el regalo de la perseverancia en la oración, que es una valiosa muestra de fe y un poderoso recurso para conseguir del Amor de Dios todo aquello que nuestro corazón y nuestra vida nos pide.

viernes, 14 de octubre de 2016

FIesta de santa Teresa de Jesús

Tal día como hoy del año 1582 la Santa de Ávila cumplía su mayor deseo: partir al encuentro del Amor eterno del Amado, Nuestro Señor Jesucristo. Toda la vida de esta Maestra, Doctora, Fundadora, Reformadora y Enamorada se resume en la búsqueda del Rostro de Cristo, en la celda del convento, en la lectura espiritual y entre pucheros y carretas por los viejos caminos de Castilla. Como la samaritana, Teresa de Ávila entregó su sed y su vida entera al Amor de Jesús, y como ella, fue recompensada por ese surtidor de Misericordia y Gracia que desde el centro del corazón salta hasta la vida eterna. Con ese agua viva pudo vivir, y enseñar, que "nada te turbe, nada te espante, quien a Dios tiene nada le falta, la paciencia todo lo alcanza, sólo Dios basta".

jueves, 13 de octubre de 2016

Viernes de la semana XXVIII

EVdHOY: "Jesús les dijo: ni de uno solo se olvida Dios, hasta los pelos de vuestra cabeza están contados: por lo tanto, no tengáis miedo". De muchas maneras nos recuerda Jesús que toda nuestra vida está en manos de nuestro Padre Dios. Hasta los detalles más pequeños de cada día, hasta el último pelo de alegría o de sufrimiento que dibuja nuestra vida, están guiados por la Providencia de las manos de Dios. Es la única razón de peso para no tener miedo, para vivir con esperanza y serenidad todos los momentos de la jornada: saber que nunca se olvida Dios de sus hijos, y que nunca les deja peligrar ni caer de sus manos. Renovamos nuestra confianza filial en la Providencia y tratamos de dejar en sus manos las alegrías, para que las bendiga, y las preocupaciones y sufrimientos, para que sepamos remontarlas con su gracia.

domingo, 9 de octubre de 2016

Domingo XXVIII del Tiempo Ordinario

EVdHOY: "Uno de los leprosos, viendo que estaba curado, se volvió alabando a Dios a grandes gritos y se echó por tierra a los pies de Jesús, dándole gracias. El le dijo: Levántate, vete; tu fe te ha salvado". La fe comienza cuando una persona es capaz de dar gracias a Dios con toda la fuerza de su corazón y de adorar a Jesús como Salvador. Sanado de su lepra, esa persona encuentra algo todavía más valioso: la fe en Jesús, que es la fe que salva de verdad nuestra vida. A partir de ahora es capaz de dar gracias a Dios en todo y por todo, y de compartir toda su vida cerca de Jesús, y así salvarla. Una invitación para que volvamos a reconocer los beneficios que Dios ha sembrado en nuestra vida desde el momento en que empezamos a existir, y a darle gracias a través de su Hijo Jesús. Memoria, agradecimiento, fe en Jesús. Una combinación que sana el alma, salva la vida y llena el corazón.

viernes, 7 de octubre de 2016

Misa comienzo de curso

A las 12 de la mañana nos reuniremos con la Santísima Virgen María en su querida ermita de Navahonda. Como familia, todos sus hijos acudimos junto a Ella para poner en manos de nuestra madre todo el curso que acabamos de comenzar. Dejamos en el Corazón de María nuestros deseos, proyectos, ilusiones, necesidades, problemas y dificultades, para que Nuestra Señora de Navahonda nos traiga de Dios la luz y la fuerza para conducirlo todo de la mejor manera posible. Terminando el Año de la Misericordia, pediremos a la Virgen María que nos guíe especialmente para recibir en nuestros corazones el Amor Misericordioso de nuestro Padre Dios y llevarlo a los demás con nuestra ayuda y comprensión.

Nuestra Señora del Rosario

Su fiesta fue instituida por el Papa san Pío V el 7 de Octubre, aniversario de la victoria obtenida por los cristianos en la Batalla naval de Lepanto (1571), atribuida a la Madre de Dios, invocada por la oración del rosario. La celebración de este día es una invitación para todos a meditar los misterios de Cristo, en compañía de la Virgen María, que estuvo asociada de un modo especialísimo a la encarnación, la pasión y la gloria de la resurrección del Hijo de Dios.

jueves, 6 de octubre de 2016

Jueves de la semana XXVII

EVdHOY: "Jesús les dijo: si vosotros sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo piden?". Es natural que unos buenos padres se preocupen con esfuerzo de que sus hijos tengan todo aquéllo que necesitan. Es propio de la naturaleza de Dios, que es Amor paterno, ofrecer continuamente a sus hijos todo aquéllo que necesitan para la vida material y espiritual. Esta certeza de los hijos de Dios, que saben que su Padre Dios nunca les deja en vacío, se concreta en la petición del Espíritu Santo. El tiene en sí todos los regalos y gracias del Amor de Dios, El nos hace recordar y vivir que somos hijos muy amados de Dios, El nos llena de luz y de fuerza para sacar adelante todo aquéllo que la vida nos requiere, Pedir el Espíritu es empezar a pedirlo todo, y por eso nos recuerda Jesús que, siendo lo primero que el Padre nos quiere dar, es lo primero que hemos de pedir. Especialmente en los momentos de oscuridad, cansancio o desorientación, pidamos con fe el don del Espíritu Santo, que nuestro Padre nunca nos dejará de conceder.

miércoles, 5 de octubre de 2016

Témporas de Acción de Gracias y Petición

Todo lo que nos rodea es fruto del acto creador de nuestro Padre Dios. Por eso, como hijos suyos, tenemos hoy la alegría de darle gracias por lo recibido, porque sabemos que detrás de cada uno de los beneficios de la vida está la mano amorosa y creadora de nuestro Padre Dios. También, como hijos suyos, le pedimos llenos de confianza todo aquello que necesitamos para sacar la vida adelante: los frutos de la tierra, la prosperidad en los trabajos, los dones sobrenaturales y la salud de cuerpo y de alma. Sabemos que detrás de cada necesidad está también la mano de nuestro Padre de Dios, cuya Providencia nunca deja vacío a quien confía de verdad en El. Damos hoy gracias por todo lo recibido hasta hoy y pedimos lo necesario a partir de hoy, también el perdón de nuestras culpas y errores, porque nuestro padre es también rico en Misericordia, y perdona los pecados con el mismo poder con el que renueva y fecunda la creación, Renovemos hoy nuestra conciencia de ser hijos verdaderos de Dios con nuestro agradecimiento y nuestra súplica confiada.

domingo, 2 de octubre de 2016

Domingo XXVII del Tiempo Ordinario

EVdHOY: "En aquel tiempo, los apóstoles le pidieron al Señor: Auméntanos la fe". La Iglesia es apostólica porque se alimenta de la fe que ha recibido de los Doce apóstoles. Estos íntimos compañeros de Jesús no sólo nos han enseñado el contenido de la fe, sino también el modo de obtenerla y conservarla en medio de las dificultades de la vida: pedírsela al Señor. Cada día tenemos que pedir a Jesús que conserve viva la fe en nuestros corazones, como los apóstoles pedían a Jesús que les diera más fe y confianza en El. Como los Doce, vivamos a fondo nuestra confianza en Jesús y en su enseñanza y pidamos cada día al Maestro que cuide la luz de nuestra fe en Dios.

sábado, 1 de octubre de 2016

Memoria de Santa Teresa del Niño Jesús

Celebramos hoy a la santa carmelita que enseñó el camino de la infancia espiritual y la búsqueda del Amor de Jesús en las cosas pequeñas de cada día: "Dios no inspira deseos imposibles. Por consiguiente, a pesar de mi pequeñez, puedo aspirar a la santidad. No tengo que hacerme más grande de lo que soy, sino aceptarme tal como soy, con todas mis imperfecciones. Quiero buscar un nuevo camino para el cielo, un camino corto y recto, un pequeño atajo. Vivimos en una época de invenciones. Ya no tenemos que molestarnos en subir escaleras; en las casas de los ricos hay elevadores. Yo quisiera descubrir un ascensor para subir hasta Jesús, porque soy demasiado pequeña para subir los escalones de la perfección. Así pues, me puse a buscar en la Sagrada Escritura algún indicio de que existía el ascensor que yo necesitaba y encontré estas palabras en boca de la Eterna Sabiduría: Que los que son pequeños vengan a Mí".